Consumir bebidas gasificadas duplica RIESGO de padecer insuficiencia renal @EsSaludPeru ‏


→ Adultos y niños son más propensos a sufrir deshidratación. Se debe beber ocho vasos con agua al día.
• Si usted es de las personas que toma poca agua durante el día y además consume bebidas gasificadas azucaradas habitualmente, está duplicando el riesgo de desarrollar una enfermedad renal crónica.

Por ello, el doctor Mario Medina Chávez, jefe del Departamento de Nefrología del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins del Seguro Social de Salud (EsSalud), recomendó beber ocho vasos con agua al día, equivalente a dos litros.

El especialista advirtió que los niños y ancianos son los más propensos a sufrir deshidratación, una causa habitual del daño renal agudo que afecta a 200 personas por millón de habitantes al año y que puede ser la puerta de entrada a la insuficiencia renal crónica y la necesidad de diálisis permanente y/o trasplante renal.

Explicó que los riñones son los grandes purificadores del organismo y que gracias a ellos nos liberamos de las toxinas.

Pero la brusca caída de esa función produce lo que conocemos como daño renal agudo y la particularidad de este evento es la rapidez con que ocurre, pudiendo ser de solo muy pocas horas o días”, anotó.

Sostuvo que consumir agua generosamente beneficia la activación de todos los órganos internos, disminuye la presión arterial, elimina los excesos de sales, urea y toxinas del cuerpo humano, favorece la no formación de cálculos renales y evita las infecciones urinarias.

Recomendaciones

Se debe señalar que este 14 de marzo es el Día Mundial del Riñón y EsSalud busca crear conciencia en la población acerca de la importancia de cuidar la salud de nuestros riñones.

Por ello fomenta la práctica de las ocho reglas de oro que previenen la enfermedad renal crónica:

  • Realizar actividad física constante
  • Controlar el nivel de glucosa
  • Controlar la presión arterial
  • Comer sano y mantener un peso de acuerdo a la edad y la talla
  • Tomar ocho vasos con agua al día
  • No fumar
  • Tomar medicinas solo cuando el médico lo indique
  • Consultar sobre la salud de tus riñones por lo menos una vez al año.