¿Cómo se prepara Corea para los empleos del futuro? #DeepMind


→ Se-dol Lee es un jugador prodigio, ya retirado, del altamente complejo y abstracto juego de mesa de estrategia llamado Go. Él se coronó campeón mundial 18 veces.

En 2016, se efectuó un histórico partido en Seúl, Corea, entre Lee y AlphaGo (i), un programa de computadora desarrollado por DeepMind Tecnologies de Google. El encuentro sumamente esperado entre el talentoso jugador coreano y el programa informático basado en inteligencia artificial (IA) incluyó cinco juegos muy disputados.

Lee solo pudo ganar uno de los cinco partidos, siendo este una de las pocas ocasiones en que un humano vence a la IA. No obstante, el programa computacional resultó victorioso, ya que el maestro coreano de Go anunció su retiro después de su derrota.

¿Es la victoria de AlphaGo contra Lee una premonición del futuro de los mercados de trabajo? La ansiedad respecto de los robots ha alimentado durante mucho tiempo las obras de ciencia ficción, desde Blade Runner hasta la franquicia de Terminator. Según una encuesta de 2018 del Centro de Investigación Pew (i), la gran mayoría de los encuestados en el mundo están preocupados de que los robots y la automatización desplazarán a los trabajadores humanos.  Corea del Sur, por ejemplo, tiene la densidad más elevada de trabajadores robots en el mundo (i): 631 robots por cada 10 000 trabajadores humanos. Hoy es una realidad que la IA y las nuevas tecnologías están cambiando la naturaleza del trabajo. Varios estudios, incluido el Informe sobre el desarro mundial 2019: La naturaleza cambiante del trabajo del Banco Mundial, han documentado muy bien algunos de los cambios que las tecnologías disruptivas están provocando en el mercado laboral.

Si bien numerosas investigaciones plantean «lo que» traerá consigo el futuro para los mercados de trabajo, no se ha dedicado tanto tiempo a «las maneras» en que las políticas pueden ayudar a prepararse para la naturaleza cambiante de los empleos del futuro. Aunque nadie tiene una bola de cristal, las iniciativas y los esfuerzos del Gobierno coreano proporcionan buenos ejemplos sobre las formas en que las políticas pueden ayudar a facilitar la preparación de las personas para los trabajos del mañana. 

Las tecnologías se pueden usar para mejorar la educación y el aprendizaje adaptativo. Muy buenos ejemplos son la capacitación y las salas de clase que incorporan la realidad virtual.

La Universidad de Tecnología y Educación de Corea (KOREATECH) está impartiendo formación que incorpora realidad virtual (i). Ese tipo de capacitación se utiliza para practicar de manera reiterada el desmontaje o el ensamblaje de equipos sin contar con maquinarias reales —a menudo caras o de gran tamaño—, o con el fin de desarrollar habilidades para tareas peligrosas.

Ecuador, con el apoyo del Banco Mundial, ha implementado programas de capacitación similares en colaboración con KOREATECH. Al mismo tiempo, los programas de educación y capacitación deberían también promover una mayor pericia digital y habilidades socioconductuales, así como el campo de la ciencia y la tecnología para que los trabajadores puedan prosperar.

Diversas asociaciones entre el Banco Mundial y organismos coreanos ayudan a nuestros países clientes a fortalecer dichos esfuerzos. Por ejemplo, el Banco Mundial y la Alianza para el Desarrollo de Competencias en el Campo de las Ciencias Aplicadas, la Ingeniería y la Tecnología (PASET) (i) tienen como objetivo apoyar el desarrollo de competencias en tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en muchos países africanos de manera conjunta con instituciones educacionales coreanas.

En los sistemas de información sobre el mercado de trabajo y las políticas de intermediación laboral y de concordancia entre la oferta y la demanda de empleo se pueden utilizar también la inteligencia y el análisis de datos facilitados por los avances tecnológicos.

El Sistema Coreano de Información sobre el Mercado Laboral, que se basa en sólidas tecnologías de la información nacionales, apoya el Servicio de Empleo Público (PDF, en inglés) del país. Además, incorpora avances tecnológicos, como el análisis de macrodatos y la IA, para posibilitar una mayor eficiencia y precisión de las plataformas de servicios. Esto permite a quienes buscan trabajo recibir información personalizada según sus propias necesidades, capacitación profesional y apoyo en el lugar de trabajo.

Cabe destacar también que en Corea las distintas plataformas de información sobre empleo público se encuentran conectadas y son interoperables para los servicios de empleo eficientes, así como para los análisis de macrodatos a fin de orientar la políticas en materia de empleo y de competencias.

Por ejemplo, el portal de capacitación laboral (HRD-Net), que proporciona información sobre cursos de formación profesional, pruebas de calificación y estadísticas relacionadas con la formación profesional, está conectado con Work-Net, una plataforma de concordancia entre la oferta y la demanda de empleo.

De esa manera, quienes buscan trabajo pueden acceder simultáneamente a capacitación e información sobre el mercado laboral adecuadas para el perfil y las preferencias personales. Tal interoperabilidad se extiende al sistema de seguro de desempleo donde se almacenan datos acerca de la historia laboral y la capacitación de los trabajadores individuales, al igual que sobre las cotizaciones al seguro.

Durante la próxima Semana de la Innovación de Corea (i), el Departamento de Prácticas Mundiales de Educación (i) y el Departamento de Prácticas Mundiales de Protección Social (i) y Trabajo (i) del Banco Mundial destacarán el éxito de este país en la integración de la innovación y la tecnología para mejorar los resultados de los trabajadores del futuro.

Si se planifican de manera inteligente, los robots, la IA y la automatización pueden generar una frontera de nuevas oportunidades. Hoy más que nunca, las asociaciones entre el Banco Mundial, el Gobierno coreano y los Gobiernos de los países clientes son un elemento indispensable para crear un futuro equitativo para todos.

Yoonyoung Cho
Economista superior
worldbank.org