(Imagen: BBC)
↓ El domingo 2 de agosto, cirujanos plásticos de todo el mundo lamentaron la pérdida de uno de sus colegas más famosos y estimados tras el fallecimiento del profesor Ian T Jackson, cirujano plástico nacido en Glasgow, a la edad de 85 años.
Jackson se graduó de la Escuela de Medicina de la Universidad de Glasgow en 1959 y pasó una década trabajando como Cirujano Plástico Consultor en la ciudad, con sede en el Hospital Canniesburn.
Ganó fama mundial a mediados de la década de 1980 debido a su extenso trabajo quirúrgico con un joven peruano, quien fue abandonado por su familia en la selva amazónica debido a una desfiguración que lo dejó sin nariz ni mandíbula superior, junto con una enorme agujero en el centro de su cara.
Bautizado como ‘El niño David’ por los medios de comunicación del Reino Unido, el niño traído a Glasgow por el Dr. Jackson para realizar una cirugía que le cambió la vida (a través de más de 90 operaciones) para restaurar sus rasgos faciales, y el Dr. Jackson y su esposa Marjorie también decidieron adoptar legalmente a David. quien luego creció con ellos aquí.
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David con sus padres adoptivos, el Dr. Ian Jackson y su esposa Marjorie (Imagen: BBC)
Una serie muy conmovedora de documentales de la BBC sobre el niño se apoderó de Glasgow (y de la nación) y tuvo un gran impacto en las personas de la ciudad que sintonizaron, las mismas personas que ayudaron a recaudar el dinero necesario para traer al niño de 3 años con su pequeño sombrero peruano a Glasgow para la cirugía.
Los productores del programa estaban « abrumados » por la calidez que le dieron a David los televidentes de todo el país, ya que el documental trazó su increíble viaje desde la selva amazónica hasta Glasgow y arrojó luz sobre su notable coraje al pasar repetidamente por el quirófano por su cirugías.
Y aunque el pequeño David Lopez Jackson fue el protagonista, los documentales también hicieron mucho para resaltar tanto las asombrosas habilidades quirúrgicas del Dr. Jackson para rehacer su rostro, como el amor y la dedicación que él y su esposa mostraron a su pequeño adoptado mientras lo criaban. como propio.
Esto se evidenció durante el documental cuando la esposa del Dr. Jackson, Marjorie, regresó a la jungla peruana en un intento de localizar a los verdaderos padres de David y pedirles permiso para adoptar a su hijo. Al llegar, dijo: «¿Y si lo quieren de vuelta? No quiero devolvérselo».
Los espectadores miraron con orgullo ver a David crecer y convertirse en un niño pequeño de Glasgow típicamente bullicioso, que amaba su fútbol (se convirtió en un fanático del Celtic gracias a su padre), antes de que la familia emigrara a Estados Unidos después de que el Dr. Jackson asumiera cargos por primera vez en Rochester. Minnesota y luego en Michigan.
David jugando al fútbol en su banda celta (Imagen: BBC)
Mientras vivía en Estados Unidos en 1992, el Wall Street Journal entrevistó a David, que entonces estaba en el último año de la escuela secundaria y tenía la ambición de seguir a su padre yendo a la universidad para estudiar medicina.
«Si tuviera un héroe, sería mi papá«, dijo al periódico.
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